La Barcelona que has visto hoy no será la misma Barcelona que verás mañana

Let's go! Después de una semana de ausencia bloguera en Barcelona... Toca retomar la labor.

Hace una semana justo (el diez de febrero) después de once horas de viaje en las que apenas conseguí dormir tres , llegué a Barcelona, una Barcelona que desde el primer momento sentí que nunca había dejado. Filosófico o no, es verdad, tuve una sensación de recordar todos y cada uno de los detalles que iba dejando a mi paso, no necesitaba mirar hacia que lado salir del metro y no dudaba a la hora de girar en una calle hacia un lado u otro.

Hice muchas cosas, algunas que no tuve la oportunidad de hacer en verano, como ir a La Boquería (donde escuché la frase que titula este post - hay grandes mentes sueltas todavía) o la visita al MACBA con Pili y otras que forman poco a poco una tradición, como los mojitos de Rubén o las meriendas después del trabajo (aunque yo ahora no trabajase...).

En resumen, una semana en la que me reencontré no solo con Barcelona, sino también con mis primas y con los amigos de BV.

Un saludo muy fuerte a todos!

pd. Otro día que esté un poco más animado cuelgo alguna foto, porque la muela (que se había olvidado de mi en todo el viaje) hoy me la está dando parda...